Crónica del Maratón de Chicago 2012

Mi octavo maratón, el primero fuera de México. Mi primer viaje sola a Estados Unidos, el maratón en el que quería, de una vez por todas, romper las duras cuatro horas. A la una de la mañana del viernes 5 de octubre, mi histeria me tenía limpiando hasta el último rincón de mi departamento. Sin sueño me fui a acostar, el taxi pasaría por mi a las 5:30 y el viernes antes del maratón es la noche en que más importa para dormir bien. 4:30 en punto, estaba saltando de mi cama, dejando listos los últimos detalles y saliendo bien abrigada rumbo al aeropuerto. Unas horas después aterrizaba en Chicago.

Salí del aeropuerto caminando hacia mi hotel, que en teoría quedaba muy cerca, pero el GPS de mi celular simplemente no funcionaba y me sentí de lo más perdida. Tras caminar unos 20 minutos sin rumbo claro, comenzó el diálogo interno, me sentía cual migrante en el desierto, perdida y ridícula, mapita en mano, pero entre calles sin señalamientos y con un IPhone inservible. Los rumbos no eran preciosos y no había una sola persona caminando en la calle, que más bien parecía una carretera, yo me recriminaba por no haber tomado un taxi, etc, etc. De pronto, por arte de magia, levanté la vista ¡y ahí estaba! el hotel tal como lo había visto en Google Maps. Respiré aliviada, hice check in, me cambié rápido y tomé un taxi rumbo a la expo. El taxista se disculpaba por el tráfico por un partido de futbol, yo reía y pensaba este no sabe nada de tráfico.

Llegué al centro de convenciones de la expo, subí las escaleras y ¡boooom! Un lugar enorme interminable, repleto de marcas, productos y stands increíbles. Quería verlo todo, comprarlo todo, no lo podía creer. Recogí mi paquete en unos 5 minutos (una entrega eficientísima considerando los 42 mil corredores que seríamos) y me dediqué a vagar probando comida, viendo nuevos productos, tomándome fotos y buscando ropa para el frío intenso que se sentía en las calles. Llevaba un short y camiseta sin mangas, necesitaba urgentemente mallas y camiseta de manga larga. Encontré unas mallas de compresión increíbles de CW-X y una sudadera conmemorativa del maratón con protección para mis deditos friolentos. Salí de la expo cuando ya oscurecía, muerta de frío y hambre. me di cuenta de que llevaba desde la mañana sin comer (No lo haaagan) y con la emoción y el nervio, se me había espantado el hambre. Caminé buscando algún lugar para cenar y nada, casas, puentes, nada de gente y el cielo cada vez más ocuro. De pronto ya había anochecido, vi un McDonald’s y entré, pedí un burrito de pollo asado, unas papas y me senté a comer solita en una mesa. Me veía a mí misma ahí sentada, sola, muerta de hambre, enmedio de un montón de gente que asustaba un poco y me daba mucha risa: la cena de carbohidratos más extraña de la historia, oficial. Me sentía perdida y con mucho frío. Cené rápido y tomé un taxi de regreso a mi hotel. Llegando me encontré con Yaz, mi roomie para esos dos días, lindísima. Ya con verla y platicar me sentí de nuevo contenta y tranquila, me bañé, me puse la ropa con la que correría (siempre duermo con ella, es una manía) y Yaz apagó la luz a las 9:30 pm, obligándome a dormir un montón (graaaaacias).

Al otro día, a las 5:30, ya estaba lista y emocionada, esperando el shuttle que nos llevaría al metro. De ahí nos fuimos a la salida del maratón, con cada vez más corredores. Desde que salí del hotel hasta la salida del maratón, pasé más de una hora desayunando: medio plátano, un pedacito de Powerbar, suero y un paquete de Sport Beans.

Ya había cometido en otros maratones el GRAVE error de correr sin desayunar y esta vez estaba muy consciente de cómo me quería alimentar para lograr mi meta. Y hablando de metas, mi gran objetivo era romper las 4 horas, pero el tiempo que había estado visualizando por las noches antes de dormir y al terminar cada entrenamiento eran 3:47:00, ese era mi gran objetivo, un poco ambicioso para la cantidad de entrenamiento que llevaba, pero iba muy, muy mentalizada a hacerlo.

Total que llegamos a la salida del maratón, encontré mi corral y me fui hasta adelante, saldría en el primer corral de la segunda oleada, a las 8 de la mañana y por ahí de la fila 10 de los 21 mil locos.

Eso de windy city no lo entiendes hasta que llegas a Chicago, el aire lo sientes hasta los huesos. Yo estaba sentada en el piso, abrazando mis piernas, hecha bolita. Una chica del staff se me acercó para darme una bolsita calienta manos, me hizo la mañana.

Después escuché que decían mi nombre, volteé y vi a Iñaki, un chico que me recordaba por mi historia en Runner’s y que correría también, me levanté y me puse a platicar con él y sus amigos, que me cayeron muy bien y me prestaron unos guantes porque seguro ya tenía la cara morada. El disparo se acercaba cada vez más y la emoción comenzaba a invadirme, despertarme. Nos deseamos suerte y por fin, ¡dieron la salida! y dentro de mí explotó algo: era un día perfecto, con clima perfecto, en una ciudad perfecta y con un maratón bruuuutal, lo único que debía hacer era disfrutar esa fiesta hasta la meta y, de paso, lograr mi objetivo de tiempo.

723180-1136-0044sLo que vi en la ruta es muuuuy dificil de describir, NUNCA, nunca había sentido tanta energía, visto tantas miradas de ánimo, emoción, admiración, fuerza, fé.

723210-1287-0040sNo había casi ningún punto de los 42 kilómetros que no estuviera tapizado de gente con carteles súper divertidos y motivacionales, niñitos extendiendo sus manos para que las chocaras con ellos, un niño como de 4 años me impactó, estaba viéndome a los ojos gritandome súper fuerte keeeeeep it uuuuuup!!!!! con ambos brazos levantados, sus puñitos cerrados, casi lloro.

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Los gritos me alimentaban, las porras lavaban mi cansancio y me hacían invencible. Muchos carteles me mataban de risa, de emoción, me invadía la fuerza, la fé, la seguridad de que lo lograría.

723196-1230-0035sLlevaba un tatuaje que me había dado el grupo de pacers de Nike pegado al brazo. Había pedido el de 3:50, pero solo tenían de 3:45, así que iba revisando con él mis parciales en los relojes cada milla y veía que le llevaba un minuto de ventaja a las 3:45, me sentía completa, feliz e invencible.

723186-1078-0049sHabía un Elvis cantando, bailando y chocando manos, miles de grupos musicales de toooodos los ritmos, una cuadra junto a una iglesia cristiana con enormes bocinas que tocaban música de fé y esperanza y gente que tocaba muchas campanitas y te sonreía con tanta emoción, un grupo como de 50 viejitos hippies tocando los Beattles, parques increíbles, casas, el cielo, los árboles, todo, todo era hermoso y perfecto, me lo bebía con los ojos y quería llevar cámaras en ellos para traerles tantas imágenes.

Pasamos por el barrio mexicano y las banderas y los gritos, el carrito de tamales, las niñas bailando con trajes típicos y el mariachi me sacaron las lágrimas.

En el barrio koreano, todos, desde los más jóvenes hasta los más grandes bailando Gangham Style con una pila como si se acabaran de tomar litros y litros de café. La energía de todas las porras se respiraba, era intensa y te empujaba a mantener el paso.

Nunca me costó trabajo seguir, no hubo dolores, pared, ni nada. De pronto sentía como una pequeña molestia en alguna parte del cuerpo y le decía a mi cuerpo: NO HAY PRETEXTOS y en el momento, la molestia se esfumaba, no me iba a dar permiso de encontrar una excusa para no conseguir mi objetivo.

Unos días antes de irme, entrevisté a Lourdes Mayol, asesora científica del GSSI, de Gatorade, quien me habló de la importancia de consumir entre 30 y 60 gramos de carbohidratos por cada hora de ejercicio intenso en competencias de larga duración, por lo que tomé 5 paquetitos de Gatorade Chews (unas gomitas deliciooooosas que llegan a México en 2013 y que tienen 30 gramos de carbohidratos por paquete) y cada 10 o 15 minutos me comía una (en el paquete venían 5 gomitas).

Lourdes me dijo que cada paquete de geles, gomitas o Sport Beans, lo debes tomar con 500 mililitros de agua (no Gatorade) para que se disuelva en el estómago y se logre el efecto deseado.Si lo consumes con Gatorade no se logra, por lo que hay que tomarlos con agua y después seguir tomando Gatorade a lo largo de la carrera. Así lo hice y funcionó como magia, mantener mis niveles de carbohidratos a tope era algo que estaba haciendo por primera vez y cuyos resultados me impresionaron.

723186-1078-0049sNormalmente, en otros maratones, solo comía medio gel en el kilómetro 21, reponiendo casi nada de carbihidratos y llegando al km 36 mareada, con dolor de cabeza y descendiendo el paso de 5:10 hasta a 8:00 minutos por kilómetro (nefaaaaasto).

Total que esta vez no me pasó, dos cosas hicieron la gran diferencia en mi desempeño en la competencia: la mente, a la que no le di permiso de poner pretextos ni bajar la guardia y la alimentación, que cuidé como nunca antes durante los seis meses anteriores al maratón, comiendo suficientes proteínas, vitaminas, hierro, poca grasa y suficientes carbohidratos de buena calidad, hidratándome muy bien y durmiendo lo más posible. No tenía idea cuánta diferencia podría hacer con esas cosas que a veces pasamos por alto pensando: yo corro y soy flaca, puedo comer lo que quiera.

723173-1556-0034sY aquí voy a ser súuuuper honesta: entrené poco :(, entre los dos trabajos y mi vida personal, debo haber hecho un 50% de mis entrenamientos, pero nunca falté a una distancia en fin de semana y, modificando algunas otras cosas, conseguí mi objetivo.

723239-1256-0047sTotal que de pronto ya estaba en el kilómetro 42, pasé una subida y frente a mí, la meta, corrí hacia ella emocionada, feliz, esperaba ver un 3:50 en el reloj, pero al voltear hacia arriba lo vi, 3:46 al cruzarla, increíble, súper emocionante, genial y muy, muy satisfactorio, más que nunca antes. (Entré saltaaaaando :D)

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723224-1033-0022sDespués me pusieron mi capita galáctica que dan en los maratones gringos, caminé despacito, me senté en el piso a estirar, a sentir dolor en toooodo mi cuerpo y a creérmela: había roto mi obstáculo, había rebasado mi objetivo y no me había lastimado nada en el camino.

Mención especial se merecen mis tenis. Por primera vez en la historia de mis maratones y carreras más cortas, llegué a la meta sin ampollas ni uñas damnificadas. Normalmente pierdo una uña en cada maratón y eso, como sabrán, es un poco incómodo. Otras veces los tenis me han provocado dolor en el arco o algún roce que tras varios kilómetros se vuelve insoportable y me trae el pie sangrando.

Estos bebés me cuidaron de principio a fin la pisada, la piel y las uñas, estuvieron conmigo en cada uno de mis entrenamientos de distancia considerable y me llevaron flotando hasta la meta. Los amé, pues, porque además se aventaron conmigo el maratón que corrí el fin de semana siguiente, que tuvo una ruta muy, muy pesada y accidentada, pero ellos me amortiguaron cuidando de mis pies y articulaciones. Después de haber pasado esta GRAAAN prueba de fuego, les doy un 10 y súper recomiendo los Puma Complete Velosis III como una opción muy accesible en precio y de gran calidad para corredores de largas distancias con pisada neutra o ligeramente pronadores, absorben genial el impacto y te permiten moverte muy cómodamente 🙂

723224-1033-0022s 723223-1044-0048sLo primero que hice fue beber un Gatorade Recover para recuperar mis músculos.

Después fui a la fiesta post maratón donde me encontré con varios conocidos y amigos, entre ellos los chicos de Total Running, nos tomamos fotos, platicamos, nos felicitamos, más tarde comimos juntos y después llegué a morir a mi hotel.

Los demás días, hasta el sábado siguiente, me la pasé paseando por Chicago, conociendo una ciudad de la que me enamoré, comiendo delicioso y recargando carbohidratos para mi siguiente reto: El Maratón de Mujeres de San Francisco el domingo siguiente.

Esos días fueron felices y mágicos, corrí a la orilla del Lago Michigan, conocí el acuario, el museo con el tiranosaurio más grande del mundo, grabé un comercial en ese museo (me lo pidieron así súuuper random mientras visitaba jaja), comí las cosas más gooordas y ricas que he comido en mucho tiempo, me tomé un martini en un bar a 400 metros de altura, fui a la playa, al zoológico y recorrí las calles de esta ciudad hermoooosa.

Les enseño en mis fotos un poquito de lo que viví y les digo de verdad que cada corredor debe hacer este maratón, porque es una experiencia indescriptible que todos tienen que vivir.

Gracias por leerme, ¡un abrazo!

Araiz

Publicado por Araiz

Periodista, bloguera y 27 veces maratonista. Xalapeña apasionada del café, viajar y correr.

27 comentarios sobre “Crónica del Maratón de Chicago 2012

  1. Todo los que describes es como si me estuviese pasando, solo que yo, aún no me aviento un marathon, además mi sueño es correrlo en New York, algún día, solo corro 21, pero agradezco que compartas tu experiencia!!! y felicidades, irte sola, y lograr ese desafío, mis respetos Araiz.

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  2. Que te puedo decir, que no hayas experimentado y comentado, te felicito….es definitivo Chicago es otro mundo, sus museos, biblioteca, sears tower, el rio…… la casa de los osos, del grandisimo Jordan….. y de mas de 40mil historias anuales de LOCOZ que culminan 42.195mts. recorriendo barrios y la arquitectura mas variada y completa del mundo en su recorrido, sigo leyendote y seguimos corriendo

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  3. Hola Araiz, muchísimas gracias por compartir esta maravillosa experiencia. No se si recuerdas hace unas semanas, antes del Maratón de la Ciudad de México, cuando presentaron la playera, muchos la criticaron y eso me molestó. Por Facebook comenté que lo importante era cruzar la meta, si querían una playera bonita podrían correr la Nike, y comentaste que el objetivo era, efectivamente, terminar pero que en otras ciudades del Mundo cuidaban hasta el mínimo detalle. Hasta ahora que leo tus aventuras en el Maratón de Chicago me doy cuenta de todo lo que le hace falta al nuestro. Ojalá los organizadores supieran esto y le dieran el valor que significan 42 mil 295 metros para un corredor de corazón. Me he identificado con cada una de tus palabras y después de esto deseo enormemente correr algún Maratón en el extranjero. Gracias nuevamente y muchas felicidades por haber roto varios records en esta experiencia!

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  4. Excelente reseña…yo lo corrí en el 2011, fui sólo y reviví mi experiencia leyendo este artículo. A mi me tocó bastante calor, rarísimo en Chicago en este tiempo.
    Te felicito por tu excelente tiempo…

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  5. No lo he corrido, pero esta semana hice una carrera larga por parte de la ruta y otro tramo a la orilla del lago y me pareció fenomenal las vistas que tiene… Ya está en mi lista de las futuras a cubrir… Gracias por compartir tu crónica.

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  6. Felicidades, por este gran logro, al leerte transmites la emocion y haces que uno se desplace mentalmente al momento de la carrera.

    Seria posible que compartieras tu estrategia de entrenamiento, normalmente me pasa lo mismo al estar entrenando para un maraton por motivos de trabajo ya no me ha sido posible terminar en forma un entrenamiento y he decidio no correr el maraton, pero me lla ma la atencion lo que comentas.

    Y alguna recomendacion de nutriliogo, o plan de nutricion que llevasta, he intentando en dos ocasiones llegar a un maraton y por malos vicios, he sufrido bajon de defensas ya a la altura de hacer distancias de 30k y tambien he tenido que abortar la mision.

    Gracias por todos tus comentarios, eres una inspiracion para todos los que andamos en esta locura

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  7. de verda que me motivo mucho su cronia que escribe y me contagia su energia y tengo que realizar este maraton saludos
    espero yegar a sus niveles de corredora

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  8. Hola! que padre experiencia, yo pretendo algún día correr el de NY… una consulta y sólo por curiosidad, como mencionaste que habias comprado las mallas y la playera de manga larga en la expo, ¿no tuviste algún tipo de incomodidad o roce con la ropa nueva??? Te lo pregunto porque sé que siempre se recomienda, al correr un maratón sobre todo, ojalá nunca usar algo nuevo… Bueno, mil felicitaciones por éste nuevo triunfo y éste nuevo récord y a seguir por muchos más!!

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  9. Hola
    En primer lugar te Felicito x lo buena corredora, y reportera.
    No se a que te dedicas pero cuando dices q entrevistaste a la de Gatorade,
    Entonces elegiste la carrera a doc contigo, aunque de psicologa ganarias mucho
    Dinero.
    Felicidades!! Y gracias x las hermosas fotos.
    Soy corredora de Maraton, amo correr pero jamas me ha ido como a ti, con
    Cero lesion o cansancio.
    Woooowww q envidia de la buena!
    Eres Grande!
    Un abrazo……ciaoo……….
    Maratonista: Eva

    Pd. Y el siguiente domingo corriste otro??!!!! Woooowww

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  10. Hola! si Dios quiere, ya me inscribí para el Maratón de Chicago 2014, ya compré mis boletos de avión y pues la verdad me causa mucha emoción. Saludos !

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